La actuación más corriente de rehabilitación que realizan las comunidades es la del arreglo de la fachada. Las fachadas están muy expuestas a las inclemencias climatológicas y debido a su altura son susceptibles de provocar situaciones de riesgo. Por ejemplo un mal estado de alguna pieza en las partes superiores puede poner en peligro a la gente que pasea por la calle.
Antes de gastar mucho dinero en rehabilitar la fachada, es conveniente averiguar cuál es el problema, de dónde proviene el defecto.
Para ello es necesario que un técnico cualificado realice una inspección. Estas inspecciones pueden formar parte de la ITE o se pueden encargar independientemente. Pídenos presupuesto y asesoramiento sobre como enfocar la reparación de tu fachada a través de este formulario:
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Principales defectos de las fachadas
Fisuraciones de fachada
Descripción de la problemática
El principal problema que genera una fisuración de la fachada es las filtraciones de agua y la entrada de aire. Nos referimos a la entrada de humedad proveniente del exterior, fundamentalmente de lluvias y en casos excepcionales de jardineras, piscinas, etc.
Causantes y detección
Fisuración por envejecimiento
En un material de revestimiento continuo como es el mortero de cemento o de cal, el paso de los años (ante una exposición al sol, cambios de temperatura entre la noche y el día, la lluvia, etc.) hace que el material pierda elasticidad progresivamente y al final, ante un cambio de temperatura, se fisure. Normalmente estas fisuras son características porque no tienen una direccionalidad clara y aparecen en forma de «mapa» o de trama.
Juntas propias del sistema
En ocasiones también puede entrar el agua por las juntas del material de la fachada, en el caso de ser fachadas de ladrillo o de aplacados. En la imagen siguiente se observa que las juntas de la fábrica de ladrillo no están colmatadas, y junto con un envejecimiento del propio ladrillo pueden ser causa de filtraciones:
Fisuración por acciones estructurales
Otra causa es la fisuración por causas estructurales. Es posible que el elemento de fachada haya entrado en carga y no estuviese preparado para ello. El caso de la imagen a continuación es una fisura por asiento diferencial del terreno, la fisura se produce desde el exterior del dintel hacia arriba en forma parabólica.
En la siguiente foto se aprecia una fisura horizontal en la fachada, que aparece debido al empuje por dilatación que ejerce la cubierta en la fachada. Esto ocurre debido a que en el perímetro no se ha colocado ninguna banda elástica que pueda absorber las dilataciones del tablero superficial de la cubierta.
Fisuración de juntas estructurales
También hemos observado en alguna ocasión que el deterioro de la junta estructural del edificio (en edificios relativamente largos, de más de 40 m aprox. Donde existen juntas de dilatación de la estructura) puede causar la entrada del agua. Los materiales con los que se sellan estas juntas son inicialmente muy elásticos, pero con el paso de los años se hacen más rígidos hasta llegar a cuartearse e incluso perder material. Como se observa en la imagen a continuación:
En algunos casos excepcionales encontramos humedades que se dan por una porosidad del material (cuando los materiales envejecen se vuelven mucho más porosos o si es una fachada muy fina en que el agua tiene que penetrar poco para llegar al interior). Se da en casos de mortero deteriorado, ladrillos manuales.
Reparaciones posibles
En el caso de fisuraciones por envejecimiento del material la única reparación posible es la sustitución del acabado, ya sea en las zonas más deterioradas o en su totalidad.
Si las fisuraciones se dan en zonas concretas se puede actuar específicamente en ese lugar. En el caso de fisuraciones por causas estructurales siempre hay que actuar en la causa del problema: por ejemplo, si es un asiento diferencial habrá que reparar la cimentación ya que si se repara la fisura con un grapado la grieta probablemente volverá a aparecer.
Manchas
Descripción de la problemática
Las manchas pueden aparecer por diversos motivos pero generalmente son debidos a la acción de la lluvia. La suciedad que provoca las manchas puede provenir del mismo material o son manchas de suciedad superficial.
Causantes y detección
Las causas de las manchas en las fachadas de nuestros edificios pueden ser muy diversas:
Defecto del material
En un muro de obra, cuando los ladrillos no están correctamente cocidos, es posible en su proceso de fabricación no se haya eliminado las sales solubles propias del material. En el momento en que el agua de lluvia penetra en el material y luego se evapora hacia el exterior puede arrastrar las sales del interior.
Defecto de la solución constructiva
El ejemplo más común con que nos encontramos es que la fachada tiene un vierteaguas diseñado o ejecutado de manera deficiente y las aguas que caen sobre el arrastran la suciedad generando unos chorretones de suciedad en la fachada.
Reparaciones posibles
Realizar soluciones constructivas adecuadas, piezas de vierteaguas con vuelo y goterón adecuado.
Diseñar en el edificio elementos de protección de las fachadas, son útiles las cornisas de coronación con aleros generosos, los balcones y otros elementos que sombrean y evitan que el viento y la lluvia incida de lleno en la fachada y deteriore su acabado.
Utilizar materiales de calidad, adecuados y compatibles entre sí, por ejemplo, si decidimos utilizar un mortero transpirable tenemos que pintar la fachada igualmente con una pintura transpirable si no queremos encontrarnos al poco tiempo con desconchados generalizados.
Desprendimientos
Descripción problemática
El desprendimiento se puede producir en fachadas tanto de acabados por piezas adheridas como de revestimientos continuos (obviamos en este apartado desprendimientos de piezas en fachadas ventiladas o muros cortina)
Se produce por una perdida de adherencia de la pieza o material de acabado del soporte, se manifiesta inicialmente con un abombamiento de una parte del paramento antes de la caída de material. Es especialmente grave ya que una caída de material de la fachada puede realizar daños serios a terceros.
Causantes y detección
Piezas adheridas
Desprendimiento de piezas adheridas que debido al paso de los años o un material defectuoso pierden adherencia. Hemos observado que algunas piezas de fachadas antiguas se fijaban únicamente con «pegotes» y no se enganchaba completamente toda la pieza.
También puede ocurrir que no se utilice el tipo de adhesivo adecuado en el caso de, por ejemplo, una pieza porcelánica fijada con mortero de cemento, que debería fijarse con un cemento cola. Estos cementos contienen un alto porcentaje de resinas y esto les hace tener una flexibilidad mucho más adecuada y una adherencia más alta a materiales de baja porosidad como es una baldosa porcelánica.
La siguiente imagen muestra el desprendimiento de piezas del soporte, debido a un deterioro del material de agarre:
Deterioro hormigón armado
En la imagen a continuación observamos el desprendimiento por deterioro del hormigón armado: rotura de hormigón debido a la oxidación de las armaduras.
Revestimientos continuos
Vemos en las siguientes fotos desprendimientos de los revestimientos continuos de mortero, que pierden elasticidad y adherencia con el paso de los años:
Reparaciones posibles
En el caso de desprendimientos en fachadas de piezas cerámicas, hay que realizar un saneado general de las zonas bufadas o abombadas. Es adecuado seguir un sistema parecido en características físicas al preexistente (permeabilidad al vapor, elasticidad, adherencia, etc.) y utilizar armaduras textiles o de fibra de vidrio para reforzar y evitar fisuraciones.
En el caso de fachadas de piedra natural o artificial, con un valor arquitectónico que merezca la pena conservar, se puede utilizar sistemas mecánicos de sujeción de las piezas. Pueden ser vistas, semiocultas u ocultas.
Humedades por capilaridad
Descripción de la problemática
La humedad por capilaridad aparece porque en la mayoría de los materiales de construcción se forman redes capilares debido a su naturaleza mínimamente porosa. El ladrillo, el mortero de arena y cemento, la mayoría de las piedras, todos estos son materiales susceptibles de tener ascensos de humedad por capilaridad.
Los muros actúan como un terrón de azúcar cuando lo ponermos en contacto con el café, «absorve» el líquido provocando un ascenso de la humedad.
Causantes y detección
Cuando hay agua en el suelo del edificio (ya sea por una humedad estacional, por filtraciones esporádicas o porque el nivel freático es cercano a la cimentación) los muros «absorveran» esta humedad y ésta provocará que desconchados, bufados del revestimiento y otros defectos constructivos.
Estos defectos normalmente se localizan donde existe humedad en el suelo: en los muros del interior del edificio situados en los bajos o en sótanos, en las partes bajas de las fachadas de los edificios, etc.
Reparaciones posibles
En un post anterior hablamos exhaustivamente de las técnicas de reparación de humedades de capilaridad.
A grandes rasgos estas reparaciones consisten en anular la red de capilares del material que provocan el ascenso de agua por el interior del material. Existen tres maneras de hacerlo principalmente:
- Contrarestando la tensión superficial de los capilares mediante electroósmosis.
- Con una barrera física (lámina impermeable, lámina de plomo, etc…) que corte la red capilar.
- Mediante ventilación (cámaras ventiladas adosadas, etc.)
Oxidación de elementos adosados
Descripción de la problemática
Existen normalmente en las fachadas un gran número de elementos metálicos que se adosan o empotran en ellas. Por ejemplo, barandillas, protecciones para colocar tiestos en el alféizar, estructuras de toldos, aleros de protección
Causantes y detección
El causante de la fisuración y abombamiento de los elementos donde se empotra el perfil metálico es la oxidación de este. Dado que el acero aumenta hasta 10 veces su tamaño al oxidarse, esto ejerce una presión que provoca la rotura del material.
Reparaciones posibles
Lo adecuado es realizar un arranque del elemento y substituirlo parcialmente. Ejecutar una unión con el elemento de soporte que sea adecuado, un anclaje de pletina con tacos epoxi al que se suelde la barandilla seria mucho más adecuado ya que se podría proteger la junta con un elemento elástico que impidiese su oxidación.